Vistas de página en total

martes, 30 de diciembre de 2008

Reflexiones de un osado ignorante

Salvando las distancias la religión es como un club. Si quieres pertenecer a ese club tienes que acatar sus estatutos. Si yo soy ateo tengo que apechugar con que cuando me muera mi única ocupación será criar patatas con el colodrillo y que si la cago, por mucho que me arrepienta, el único que puede perdonarme es el projimo y en última instancia yo mismo..
Es por esto que me hace mucha gracia la gente que se queja de la iglesia católica ante decisiones que no le gustan. Es cierto que existe la figura de la “disentio”, no se si se escribe así, Ángel seguramente me lo corregirá además de darme fuerte y flojo por estas reflexiones, pero si algún dogma o decisión no te parece correcta lo mejor es salirte como hizo Lutero.
Decisiones como las de dar a Don Fernando Ferrín Calamita una mención de honor han encendido la cólera de muchas personas. Ante estas decisiones, si eres católico, sólo puedes estar de acuerdo ya que el señor Calamita lo único que hacía era seguir los dictados de su “club”, La iglesia piensa que el único matrimonio válido es el matrimonio católico y es por eso que los homosexuales que se quieran casar y los heterosexuales que se quieran divorciar no lo pueden hacer a ojos de la iglesia, así que si eres católico y estás en esos casos sólo tienes dos opciones aguantarte o salirte. Asociaciones como la de divorciados católicos u homosexuales casados católicos no caben en este organismo. Es como si en el Madrid se hiciera una peña Samuel Etoo.
Lo mismo pasa con las relaciones prematrimoniales, las misas preconciliares, la inseminación artificial, el trasplante de órganos, la pena de muerte, el uso de medidas anticonceptivas… etc. Si quieres hacerlas deberás salirte de la iglesia católica. No se puede tener una doble moral y para lo que me conviene estoy y para lo que no, no estoy.
Volviendo al caso de Don Fernando Ferrín Calamita otra cosa en cuando las leyes del país vulneran las leyes de Dios, Tu cuando eres juez te debes a las leyes del Estado y si no, la única opción que tienes es no ser juez., es como si yo fuera militar pero estuviera en contra del uso de las armas. Si no quieres casar a homosexuales pides la baja de la judicatura y buscas un trabajo más acorde con tus creencias.El problema está en que esas personas muy religiosas(de cualquier confesión) tienen que convivir en una sociedad que vive en otro plano y por eso tienen dos opciones o se adecuan al nuevo sistema, modificando sus usos y costumbres o se es un talibán.
Otro problema que tienen las confesiones religiosas es que sus inspiradores vivieron hace muchos años y que su mensaje se ha ido modificando o diluyendo. Por poner un ejemplo , el Obispo de Ciudad Real expulsó a la presidente de una hermandad religiosa por ser lesbiana, ¿es eso caridad cristiana?, ¿está esa decisión conforme a lo que predicaba Jesús o por el contrario está en contra de nuevas normas que la iglesia dictó?. ¿Se la echó por ser poco cristiana? ¿por ser lesbiana? ¿por negligencia en su trabajo como presidente?.
¿Qué es mas importante el celibato y la castidad o el amor?. Al fin y al cabo si eres célibe y casto estas siendo un tacaño con el amor ya que no das todo el que podrías si se entienden las manifestaciones físicas como un acto muy importante del amor.
Son reflexiones que me hago por no estar dentro del seno de la iglesia católica ya que seguro que si estuviera dentro lo entendería.
De todas formas esto que he escrito lo he hecho desde el respeto y si alguna persona se ha sentido herida espero que perdone mis palabras fruto de la ignorancia y que vaya por delante que no he escrito esto con mala fe porque no tengo fe ni buena ni mala.
PAZ y AMOR

17 comentarios:

emilcar dijo...

Las misas preconciliares están autorizadas ya por el papa Benedicto XVI y ¿los transplantes de órganos? Consultaré a mi párroco, pero creo que con eso no tenemos ningún problema.

emilcar dijo...

El caso de Calamita y de la presidente de esa hermandad en realidad son muy parecidos: el hecho de que por medio aparezca la homosexualidad impide evaluar correctamente los hechos, por el gran eco mediático que tienen estas cosas.

Realmente nadie ha podido saber si esa buena mujer era o no un puto caos como presidenta y por otro lado, es indudable que Calamita merecía una sanción, pero quizá se les ha ido la mano aprovechando el escenario de linchamiento público y que el tipo, al estar como una cabra, no tiene a NADIE que le compadezca. La mención honorífica es un canto al sol.

En cualquier caso creo que Calamita no merecía una sanción mayor que el juez que dejó libre al asesino de MariLuz y así ha ocurrido.

Ángel dijo...

Diego, tus reflexiones no son en absoluto ofensivas. Ocurre que a veces la Iglesia, cuyas cabecicas visibles son humanos como tú y como yo, yerra.

Decía Chesterton algo así como que este mundo está lleno de ideas cristianas que se han vuelto locas. El amor es una de ellas. Al denominar "amor" a todo, nada ha vuelto a ser amor del todo.

Hoy en día, el "ama y haz lo que quieras" de San Agustín podría valer hasta para defender la pederastia, porque nadie entiende que el amor es caridad (palabra que da una tiricia que te mueres y nos recuerda a señoras burguesas dándoles mendrugos de pan a hijos de proletarios), y que la caridad viene de Dios.

Cuando faltamos a la caridad, al verdadero amor, nos hacemos daño. Pero es que, además, si somos católicos, hacemos daño a los demás. Y ay de aquel que causare escándalo...

No sé si el juez Calamita hizo bien o mal. Personalmente, rezo por él cuando me acuerdo, sin más. Y por otros muchos, católicos o no, homosexuales o heterosexuales, de izquierdas o derechas. Igual da. Por todos mis compañeros y por mí el primero.

Tampoco sabía lo de esta señora lesbiana. Faltan datos, al igual que para todo ese batiburrillo de asuntos que sacas a colación. Desde mi libertad puedo guardar reservas respecto a alguno (no muchos, es cierto), pero creo que convendrás conmigo en que las relaciones prematrimoniales no son equiparables a la experimentación con embriones humanos. Ese saco es demasiado amplio. Habría que ir caso por caso, y yo al menos no estoy capacitado. Hay ideólogos, teólogos, ateólogos, filósofos, antropólogos y un montón de gente aportando puntos de vista y opiniones que tienen más peso que la mía (aunque ahora que soy Doctor ya no sabría yo decirte...). La prudencia y la humildad, también intelectuales, siempre que no se confundan con timoratez o meapilismo, son virtudes que toda buena persona, cristiano o no, debería cultivar.

El mensaje de Cristo está reflejado de uno u otro modo en todos esos asuntos, pero va mucho más allá. Jesús nos pide imposibles que no tendría derecho a pedirnos si no fuera Dios. Cuando habla de la fe que es necesaria para mover montañas, habla de perdonar, rezar y bendecir a tus enemigos. No tenemos fe suficiente en él para eso, porque es inhumano, o mejor dicho, porque es sobrehumano. Es una gracia suya. Un don, si nos ponemos del todo homiléticos. Y hay que pedírselo.

Efectivamente, el mandamiento fundamental es el del amor. El amor bien entendido, el amor recto, que diría Rouco. Y como lo diría Rouco (obispo que me cae mal, si sirve de atenuante), no nos gusta y nos huele a incienso. Si fuéramos capaces de desproveernos de toda la mala herencia cultural cristiana que hemos tenido que aceptar sí o sí, probablemente habría más cristianos y los cristianos serían más cristianos.

Por eso me gustan tanto los conversos.

Ángel dijo...

Por cierto, la palabra de verificación para el comentario anterior era "Pretor".

¿Las pones tú?

emilcar dijo...

El amor definido como caridad es algo que los tres tendríamos que tener muy claro, ya que fue el objeto de la fantástica homilía que Fernando Colomer pronunció en mi boda con Rocío :-)

Cuallis dijo...

Emilcar: lo de los trasplantes venía por la resurrección de la carne. Supongo desde mi educación cristiana que el que resurrezcas o resurrecciones sin órganos será lo de menos ya que el milagro que se hace se puede lograr haciendo la gracia completa osea con recambio de piezas donadas en un acto de amor y caridad sea cristiana o no.
El tema de la homosexualidad y la iglesia es un tema peliagudo yo desde mi punto de vista creo que cualquier acto de amor y de entrega a otra persona debe de ser buena y que Dios nos quiere a todos por igual ya que todos somos sus hijos, de todas formas lo digo desde una postura cómoda que es la de la educación pero no la fe.hacia Cristo.
Ángel, me han gustado mucho tus reflexiones.
En cuanto a los embriones humanos todo depende de si se considera el embrión persona o célula. Yo lo considero célula y como tal estoy a favor de la reproducción artificial y la fecundación in vitro, igual que estoy en contra del aborto salvo en casos muy pero que muy muy excepcionales.
Me queda una duda, ¿cual es el amor bien entendido?

Ángel dijo...

El amor bien entendido es, en mi opinión, el que sobrepasa nuestras fuerzas; aquel del que da la vida por sus amigos y por sus enemigos.

En un plano más terrenal, el amor bien entendido es el que no se queda en el mero sentimiento. El que lo trasciende y acepta componentes tan esenciales como la renuncia, el compromiso, el romance al modo romántico, la abnegación, la anteposición del ser amado a nuestro propio yo... Creo que ese es el amor sobre el cual se debe construir, y no sobre las mariposicas estomacales del primer flechazo.

Y no se me malinterprete. No estoy hablando de anular o racionalizar los sentimientos, sino de asentarlos y dotarlos del contenido que requieren para ser firmes y no arenas movedizas sin cartel de "peligro".

José Miguel dijo...

Decir que el amor es una idea cristiana me parece mucho decir. Lo diga Chesterton o el Dr. Cobacho.

José Miguel dijo...

El caso del juez Tirado también estuvo sujeto a un gran eco mediático. De hecho, mucho mayor que el de Ferrín Calamita. Quizá tú, emiilcar, estés participando ahora de su linchamiento público. Pero, claro, él no ha declarado abiertamente sus creencias religiosas. El señor Calamita ha pretendido hacer de un juicio por prevaricación un juicio contra la religión católica.

Ángel dijo...

El amor es, sin duda, una idea cristiana. Otra cosa es que sea exclusivamente cristiana. Por supuesto que no. Es más, incluso el nombre o los nombres que Benedicto XVI emplea en su Deus Charitas est son griegos (eros y agapé).

emilcar dijo...

Hombre, Jose, a mí el juez Calamita me parece más un desequilibrado mental que un católico ejerciendo de tal. Creo que le hubieran montado el pollo igual aunque no hubiera ido de católico por la vida. Además, no me gusta que haya hecho alusiones a sus creencias ya que cum ieiunatis noli te fieri sicut hypocritaes tristes

José Miguel dijo...

Entonces el amor no es una idea cristiana en el sentido que se desprende de la cita de Chersterton. Era una idea que fue adoptada (y adaptada) por el cristianismo y que luego, según el Dr. Cobacho, se ha vuelto loca.

La que sí es una idea originalmente cristiana es la caridad, que supongo que también se ha vuelto loca. A lo mejor lo que pasa es que estamos confundiendo términos y deberíamos usar la palabra "caridad" cuando nos referimos a ese amor cristiano a Dios y al prójimo como a ti mismo, y dejar la palabra "amor" para cuando no restringimos su significado.

En cuanto a lo de Calamita, me alegra que pienses así, emilcar. Yo estoy de acuerdo contigo. Pero yo también he escuchado en Popular TV y en Intereconomía voces reputadas (empezando por Juan Manuel de Prada) que no sólo le compadecían sino que defendían como suyos los argumentos de este señor. Y defendían precisamente que el linchamiento público se debía, entre otras cosas, a que era católico.

Lo que quería hacerte notar es que, sabiendo muy poco de los dos casos (Tirado y Calamita) tú mismo defiendes a uno y condenas al otro.

En cualquier caso y hablando en abstracto, creo que los tres estamos de acuerdo en que ningún juez debería dar más peso a sus convicciones religiosas que a su obligación de aplicar las leyes vigentes.

Al final, cuallis se ha salido con la suya. Con éste ya van 12 comentarios. ¡Y qué comentarios!

Ángel dijo...

Me temo que todo eso de las ideas locas es de Chesterton. El Dr. Cobacho, al que el Prof. Morales debería llamar Ángel, es un mero transcriptor. Ya se sabe que de la mar el mero y de la tierra el carnero. Por eso lo he dicho.

Chesterton, de todas formas, no habla del amor (eso sí es cosa mía). Habla de la humildad, si no recuerdo mal.

De todas formas creo que la idea de amor restringido es la pagana, no la cristiana, desde el momento en el que se abre a Dios y al enemigo, por lo pronto. Y por lo tarde, el amor que a mí no me gusta el precisamente el que se ve desprovisto de componentes como los que cité en mi primer comentario. O sea, que la caridad (que para lo que yo entiendo, es sinónimo, o debiera serlo, de amor), es desde luego más amplia que el amor meramente sentimental.

emilcar dijo...

Por lo que dice José Miguel entiendo que el juez Tirado es el que dejó libre al pederasta que asesinó a la niña. Yo no defiendo a ninguno de los dos, sólo digo que resulta chocante para la mayor parte de la sociedad las penas que se les han aplicado a uno y a otro.

Cuallis dijo...

Si, me he salido con la mia.
En lo del el Juez Tirado os recuerdo que el no es culpable de nada ya que el encargado de realizar estos trámites es el secretario del juzgado aunque sea el juez el que en última instancia de su visto bueno.
La culpa no fue del juez sino de la ingente cantidad de casos que tenía sobre su mesa. La justicia está saturada y es normal que pasen esas cosas y si no pregúntale a Jose Enrique.

José Miguel dijo...

Me temo que lo que son sinónimos para el Dr. Ángel no lo son para la RAE. Quizá algún día.

En cuanto a lo de los jueces, lo que yo digo es que pones en duda la culpabilidad de Calamita por el lío mediático, y sin embargo no pones en duda la de Tirado, pese al mismo o mayor lío mediático. Por cierto, hoy acabo de leer otra muestra de simpatía hacia don Fernando. El Cabildo Superior de Cofradías de Murcia ha decidido otorgarle no sé qué medalla honorífica. No sé si es a la que se refería Cuallis en la entrada original, pero sí me sé de uno que este año va a pasar bastante de las procesiones. Que ya está bien. Y no lo digo por el caso de las lesbianas, sino por el de Rafa.

ESTRABINSQUI dijo...

Estoy muy de acuerdo contigo. La Iglesia Católica tiene que rectificar salvo que quiera que no le siga ni Dios (creo que el propio Jesús estaba muy lejos de algunos de los postulados y dogmas católicos: homosexualidad, castidad, sacerdocio masculino exclusivamente, fariseismo, en definitiva, etc.).